Este mes de septiembre nos trajo libertad, pero en Chihuahua nos trajo gastos, y no nos referimos a «la peda» del grito en palacio, perdon, a la cena en el Palacio de Gobierno durante la noche del grito, sino a los gastos que la gobernadora hizo solo para oponerse a la federación. Recientemente se descubrió que se gastaron más de 8 millones de pesos solo en publicidad en tan solo 15 días para la campaña de recolección de libros de texto gratuitos de años pasados. Bueno, ¿qué podíamos esperar si ya nos habían dado una muestra con su anterior derroche en publicidad y terminó en un fiasco?
Esto se suma a la suma millonaria gastada en la impresión de cuadernillos que carecen de nivel académico, lo que costó a Chihuahua casi 50 millones de pesos debido a su capricho de no querer los libros de AMLO. Según el medio ZonaFree, se gastaron 8,238,085 pesos de recursos públicos en publicidad, desglosados de la siguiente manera:
– Radio: $4,151,116.26
– Televisión: $3,300,722.68
– Prensa: $786,246.50
Además de estos gastos, se imprimieron cuadernillos por 37 millones de pesos mediante adjudicación directa, solo como una primera etapa.
Es lamentable que tengamos que gastar este dinero en caprichos en lugar de tener hospitales mejor equipados. En contraparte, los diputados locales de MORENA están recolectando firmas de ciudadanos para pedir que se entreguen los libros de texto gratuitos. Cuauhtémoc Estrada afirmó que estas firmas representan la voluntad de 100 mil padres de familia que rechazan la acción de Maru por no entregar los libros. Incluso el día de hoy diputados de MORENA entregaron la denuncia formal ante la Auditoría Superior del Estado de Chihuahua ya que cada juego de copias entregado costo $90 pesos.
Este gobierno cada día se ve más envuelto en casos que bien podrían ser corrupción. Casi parece corrupción, huele a corrupción y se percibe como tal. Un ejemplo es el posible conflicto de intereses con «El Primaso» como Rector de la UACH y su falta de transparencia en sus gastos, así como los contratos millonarios con la actual pareja sentimental de Maru, conocido como el «magnate de los carros», Cruz Russek. Estos casos no dejan de preocupar a los chihuahuenses. Incluso la Fiscalía Anticorrupción del Estado ha comprado vehículos a este señor.