Chihuahua.- A punto de un motín se vio el personal médico y guardias de la clínica 44 del IMSS, cuando el médico responsable anunció la suspensión de consultas y que regresaran el día de mañana.
Lo anterior ante la saturación de la unidad, que no se daban abasto, por lo que el encargado salió a dar el aviso.
Esto molestó a al menos 50 derechohabientes que ya tenían horas esperando su turno para que se les atendiera, por lo que algunos arremetieron contra el personal, así como contra los guardias privados por lo que dieron aviso al sistema de emergencias 9-1-1.
Varias unidades de Seguridad Pública Municipal arribaron al inmueble ubicado en la Avenida Tecnológico y calle Pino, donde entablaron un diálogo con los más inconformes, logrando calmar los ánimos y evitar una riña.
Finalmente las personas tuvieron que desalojar la unidad y tendrán que regresar el día de mañana con la esperanza de que se les atienda.
